Niño atacado por perro: fallo marca precedente y responsabilidades claras

La sentencia sobre la mordedura de un ovejero alemán establece que la prevención y el control de la mascota son responsabilidades compartidas de cuidadores y padres.

Sociedad06/10/2025Agustina TolabaAgustina Tolaba

215088

Un niño de seis años sufrió una mordedura en el rostro por un perro ovejero alemán de 11 años mientras participaba de un cumpleaños en la casa de amigos de sus padres, un hecho que terminó en una demanda judicial y que ahora puede sentar un precedente sobre cómo actuar ante ataques de animales domésticos.

El incidente ocurrió cuando la familia dueña del perro se ausentó por vacaciones y dejó la custodia de la vivienda y la mascota a otra familia amiga. Durante la semana, la familia cuidadora organizó un festejo de cumpleaños para su hijo, momento en que el menor invitado fue mordido por el perro, quedándole una cicatriz significativa.

El caso fue analizado por la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial del distrito judicial de San Isidro, donde se debatió la responsabilidad tanto del dueño del animal como de la guardiana temporal. Según explicó en su columna por Aries el Dr. Napoleón Gambetta: “La resolución refleja la figura de culpa concurrente: por un lado, la madre del niño actuó con negligencia al no supervisar adecuadamente a su hijo, y por otro, la cuidadora del perro no tomó medidas para evitar el riesgo conocido”.

la-joven-de-21-anos-estuvo-detenida-en-ezeiza-y-ahora-regreso-a-bolivia-foto-gentileza-radio-origen-Ex Miss Bolivia, condenada por llevar 300 kilos de cocaína: “su aporte fue secundario”

El fallo determinó que la guardiana debía haber anticipado posibles interacciones entre el perro y los niños, considerando la edad de los invitados y el tamaño del animal. Medidas preventivas como encerrar al perro o mantenerlo separado de la zona de juego habrían reducido el riesgo.

Finalmente, la indemnización se asignó en partes iguales: un 50% a la madre del menor y un 50% a la guardiana, extendiéndose la responsabilidad al propietario del perro. Gambetta destacó que este caso constituye un precedente útil para situaciones similares: “Permite entender cómo se distribuye la responsabilidad cuando hay un animal de por medio y demuestra la importancia de la previsión y la supervisión tanto de los padres como de quienes cuidan a la mascota”.

El especialista remarcó que “en casos de mordeduras, la clave está en evaluar la previsibilidad del riesgo y la conducta de todos los involucrados”, y consideró que esta sentencia será un ejemplo para futuras demandas por accidentes con animales domésticos.

Te puede interesar
Lo más visto

Recibí información en tu mail