
Las elecciones de medio tiempo 2025 en Salta ya son historia. De ella se deben tomar varias lecciones porque la aparente escasa importancia que la ciudadanía le asignó, encendió alarmas que la política no debe ignorar.
El gobernador Gustavo Sáenz cumplió uno de sus deberes constitucionales y dio su informe sobre el estado general de la Provincia. Su mensaje no dejó de lado que fue el último de su gestión pero que está dispuesto a continuar para cumplir los planes diseñados para el corto, mediano y largo plazo. El proceso electoral le dio el tono a distintos tramos de su discurso.
Opinión01/03/2023El Artículo 144 de la Constitución Provincial, que determina las Atribuciones y Deberes del Poder Ejecutivo, impone que es deber del Gobernador informar a las Cámaras reunidas en Asamblea Legislativa, el 1 de marzo de cada año, sobre el estado general de la Provincia. Y es lo que hizo en una ceremonia durante la que, por un poco más de dos horas, mostró lo logrado institucionalmente desde 2019.
Sin dudas que el que va a cerrar el 10 de diciembre próximo será un mandato que la historia registrará por sus dificultades, que llevaron a que en 2020 el mandatario hablara ante una Asamblea virtual. En tres años se sucedieron una pandemia, el incendio de parte del territorio y una sequía que generó una crisis hídrica que corporizó un diseño de prioridades erróneo. O la acción de gobiernos que dejaron de lado durante dos décadas las verdaderas demandas sociales, según subrayó Sáenz.
Un repaso de sus cuatro mensajes a la Asamblea Legislativo muestra la ratificación del sustento de la gestión que transita su último año. La gestión, entendida como la búsqueda incansable de recursos para realizar obras y el trabajo en equipo son las líneas directrices. Mostrar la acción de gobierno con hechos y no con palabras es la síntesis de sus propósitos.
Empezó en 2020 pidiendo unidad. La pandemia ya había puesto en cuarentena a los proyectos de cada argentino y ante un recinto vacío y desde una pantalla exhortó a “derribar muros”. Aseguró saber cómo lograr “una Salta distinta, con las mismas oportunidades para todos” si se imponía el diálogo, la unión y la paz.
En 2021, explicó su proyecto de “una Salta prospera productiva, justa, equitativa y solidaria” que solo se puede lograr “trabajando todos juntos dejando de lado intereses particulares y mezquindades”. En 2022 ratificó el mismo rumbo y el compromiso de un intenso trabajo porque “no queremos caridad sino la posibilidad de progresar con nuestro esfuerzo, con dignidad y amor por nuestra tierra”, dijo. Allí quedó planteada la imagen que lo suyo se expresa “con hechos y no solo con palabras” y repitió que “Nadie puede solo. Se debe trabajar en equipo, con objetivos bien definidos, con una ruta clara, sabiendo lo que queremos”.
Este 1 de marzo, evaluó lo realizado en tres años “muy difíciles”. A los logros los adjudicó a un equipo, que trabajó al lado de cada salteño, “con un gobierno presente y una gestión participativa; con quienes aman a Salta, su gente, su tierra y su historia”. Esta afirmación dio paso a una dura crítica a quienes cuestionan su tarea sin tener hechos para mostrar y se sumó a otras referencias realizadas contra la actitud de los legisladores nacionales que no levantan la mano a favor de los intereses de los salteños, sino del sector político al que representan.
Sin tapujos hizo notar que se sintió solo en los tiempos más críticos, como cuando arreciaban los casos de Covid, cuando faltó agua y cuando los incendios se devoraban parte de los bosques en el norte. Denostó a quienes dan cátedra “de cómo deben hacerse las cosas desde la comodidad del sillón del entrevistado o desde las redes sociales”. Los calificó de “políticos oportunistas y miserables que no hicieron nada por Salta”.
Así quedó abierto el 125° Período Ordinario de Sesiones y también una campaña electoral que será exigente. Los 40 años de democracia que se cumplen este año se merecen que las contiendas electorales se jerarquicen y de manera responsable, se dejen en claro los objetivos por los que se pretende llegar al Gobierno.
Salta, 01 de marzo de 2023
Las elecciones de medio tiempo 2025 en Salta ya son historia. De ella se deben tomar varias lecciones porque la aparente escasa importancia que la ciudadanía le asignó, encendió alarmas que la política no debe ignorar.
La mayoría de los salteños eligió seguir construyendo un destino que se forje desde acá, desde Salta. En las elecciones de ayer el 70 % de los salteños se expresó por fuera de la pretendida polarización entre la Libertad Avanza y el Partido Justicialista.
En la provincia de Salta se definieron dos liderazgos claros y excluyentes. El resto, por ahora, parece espectador de una disputa mayor. El peronismo, mientras tanto, atraviesa su peor momento en ocho décadas.
Los salteños transitan las horas de reflexión previas a la toma de decisión cívica más importante que tiene el ciudadano. Cuatro décadas de democracia ininterrumpida muestran que es tiempo de cuidar el nivel de participación.
En esta turbulencia económica que atraviesa la Argentina, con un nuevo empréstito internacional y la incertidumbre recurrente, resulta ineludible reflexionar sobre el papel central que cumple el trabajo en la vida de millones de ciudadanos.
Luego de aguardar más de 60 días su tratamiento, la ficha limpia deberá esperar hasta el próximo año legislativo para una nueva oportunidad. Un voto impidió su sanción, excluyendo a la Argentina del grupo de países que tienen una norma que impide que condenados accedan a un cargo electivo.
La comuna refuerza la infraestructura urbana con la incorporación de nuevos refugios y la puesta en valor de los existentes, en beneficio de los usuarios del transporte. Desde el inicio de gestión, más de 500 fueron intervenidos.
El flamante senador por Capital por La Libertad Avanza celebró su victoria con un fuerte llamado a transformar Salta bajo los ideales del cambio nacional.
Aníbal Fernández, Leila Chaher y otros referentes del Partido Justicialista, brindaron una conferencia tras las Elecciones.
Se trata del exgerente del Hospital de Orán y gendarme Fabián Valenzuela, candidato del Frente Salteño que logró una banca en la Cámara baja provincial.
En la provincia de Salta se definieron dos liderazgos claros y excluyentes. El resto, por ahora, parece espectador de una disputa mayor. El peronismo, mientras tanto, atraviesa su peor momento en ocho décadas.