Ante una nueva crisis institucional

En mayo de 2019, Cristina Kirchner ideó un raro engendro, nunca visto antes, consistente en crear una fórmula presidencial en la cual ella ocuparía la vicepresidencia, nominando a su vez para el primer lugar, a quien hasta ese momento y durante diez años, había sido uno de sus más tenaces críticos.

Opinión10/05/2022 Jorge Folloni

columnas (6)

Esa creación contra natura, escondía un acuerdo secreto, que consistía en que ella lo convertiría a Alberto Fernández, quien nunca imaginaba  haber podido llegar a ese lugar, en presidente de la Nación, a cambio de su compromiso en poner todos sus esfuerzos encaminados a liberarla de las numerosas causas penales que pesaban sobre ella.

Pero además, pesó la convicción del kirchnerismo de que los votos que podía reunir Cristina como principal candidata, si bien alcanzaban a alrededor de un 30%, no eran suficientes para ganar, ya que para lograr la victoria electoral, resultaba imprescindible el acompañamiento de los sectores independientes.

Para lograr esto, resultaba imprescindible poner al frente de la fórmula otra cara que sirviera para hacer creer que ahora volvían distintos y con actitudes moderadas. Que Cristina ya no quería nada y que prácticamente se retiraba de la política.

Y hubo mucha gente que ante el fracaso económico de Macri, creyó o al menos se aferró a esa esperanza y los votó.

Ahora se descubre con una mezcla de estupor y espanto, que nada de eso era verdad, que volvían iguales y con la decisión de que no perderían nuevamente el poder, para lo cual apelarían a cualquier medio.

Así fue como a Fernández, le permitieron tan solo el manejo del área económica que ahora le exigen que también se las entregue, pero todas las grandes reparticiones que manejan el grueso del dinero público, como son ANSES, Aerolineas Argentinas, PAMI o la Afip, la reservaron para que las ocupen militantes de la Cámpora.

Pasaron ya más de dos años del ejercicio de este gobierno bicéfalo y Cristina ya ha perdido la paciencia frente a la ineficacia de Alberto ya que pese a pequeños avances, el grueso de las causas penales en su contra, continúan avanzando y poniendo en riesgo su libertad.

Roto el diálogo desde hace más de dos meses y perdida la confianza, lo que nació como un gobierno bicéfalo, se convirtió de hecho, en dos gobiernos distintos.

Entretanto el país, se asemeja a un barco en medio de una tempestad, donde la tripulación, lejos de aunar esfuerzos para salvarlo de un desastre, está a los  golpes disputándose el manejo del timón. El resultado no puede ser otro que la catástrofe que estamos viviendo.

Con suerte, la inflación terminará el año en torno al 65%, mientras que el tipo de cambio seguirá subiendo y el Banco Central carente de reservas suficientes, podría terminar no consiguiendo los 2300 millones de dolares para cumplir el acuerdo con el Fondo Monetario, lo cual puede volver a colocarnos en default con las graves consecuencias de aislamiento internacional que ello implica.

Si bien el gobierno no tuvo ni tiene un plan económico que dé certezas del rumbo a seguir, ni aún el mejor plan económico puede servir, si falta lo esencial que es la confianza en el gobierno y condiciones de seguridad jurídica, que son requisitos imprescindibles para atraer capitales que inviertan para nuestro desarrollo y creación de empleos.

Muy por el contrario, el kirchnerismo duro, ha asumido en la práctica, el papel de oposición, planteando y exigiendo medidas demagógicas que sabe son de imposible cumplimiento en la situación de tierra arrasada que estamos viviendo, tales como una nueva moratoria previsional o aumentos de sueldos de más de un 60%. Todo ello, con el solo propósito de poner a su propio gobierno, en aun mayores dificultades, que contribuyan a su fracaso y finalmente a la renuncia de Alberto.

La crisis institucional que vivimos, solo tiene parangón con la catástrofe que afrontamos en el año 2001 y de cuyas consecuencias, aún no hemos logrado reponernos.

Te puede interesar
Frase 1920 x 1080

Oportunidad

Opinión14/11/2025

Cierra una semana en la que el protagonismo de los gobernadores tomó cuerpo. Mientras el gobierno nacional mantiene abiertas las puertas de la Casa Rosada al diálogo con los mandatarios provinciales, desde el sector privado también se demandó de ellos definiciones sustanciales para su sostenimiento.

Frase 1920 x 1080

Emergencias

Opinión13/11/2025

Con puntualidad se están encarando las acciones propias del cierre del año. Las prórrogas de emergencias vigentes en la Provincia han comenzado a tratarse en la Legislatura como sucede, en algunos casos, desde hace tres décadas.

Frases políticos

La hora de las decisiones: quién conduce el país en la era de la IA

Antonio Marocco
Opinión13/11/2025

Hace algunos días terminé de leer el último libro del politólogo italiano Giuliano Da Empoli: La hora de los depredadores. Se trata de un ensayo que continúa explorando el mundo de Los ingenieros del caos. La obra pone la lupa sobre las grandes transformaciones sociales, políticas y económicas que están acelerando a ritmo vertiginoso las elites tecnológicas en alianza cada vez más explícita con los líderes populistas.

Frase 1920 x 1080

Reforma

Opinión12/11/2025

Un año electoral intenso alcanzó sus objetivos generales de reforma legislativa pero también dejó datos sobre la política que la dirigencia del sector no debe ignorar. Debe trabajar para mejorar el vínculo con la sociedad, dado que es un elemento fundamental para la consolidación de la democracia.

Frase 1920 x 1080

Desregulación

Opinión11/11/2025

La falta de federalismo que caracteriza al sistema institucional argentino ha tenido este martes una nueva manifestación. El Ejecutivo nacional dispuso desregular las cuotas que se pagan en los colegios privados sin advertir que se trata de decisiones que cada provincia asume como responsable de los ciclos de educación obligatoria.

Frases políticos

La historia vuelve, pero con aire acondicionado

Mónica Juárez
Opinión11/11/2025

Hay frases que se repiten en la política argentina como los hits del verano. Una de ellas es: “ahora sí, se viene una nueva etapa”. Y ahí es cuando uno se acomoda en la silla, prende el aire —porque siempre hace calor cuando cambian ministros— y piensa: ¿cuántas veces escuchamos esta escena?

Lo más visto

Recibí información en tu mail