
Tal como venimos insistiendo desde hace tiempo en estas columnas, en momentos de crisis la centralidad de la política pasa por el Congreso de la Nación. Allí se debate el presente y el futuro de la Argentina.
Comienza una semana definitoria con vistas a los comicios nacionales de este año, que cerrarán con la elección presidencial. Hasta el miércoles –aunque legalmente es hasta promediar la mañana del jueves- se extiende el plazo para inscribir alianzas o partidos que van a participar de la PASO de agosto y las generales de octubre.
Opinión10/06/2019Por la tendencia impuesta, la mayoría de los partidos tradicionales ingresará a la compulsa electoral a través de coaliciones, frente, alianzas o como quiera llamarse a conglomerados que –se supone- condensan objetivos comunes, aunque estos no sean otros que llegar al poder y cuya dirigencia no tiene otra pretensión que ocupar una función electiva. En Salta se estima que habrá cuatro frentes, cuya definición será difícil si se trata de construirla a partir de un perfil doctrinario.
En líneas generales se podría adelantar que habrá dos con un perfil claro. Uno de ellos se integrará con agrupaciones ubicadas detrás del liderazgo indiscutido de la ex presidente Cristina Fernández y el otro, con partidos de raigambre marxista.
Los otros dos frentes serán híbridos constituidos en torno de la presencia dominante de dirigentes relevantes de la política local. Tres nombres emergen en esos sectores: Juan Manuel Urtubey, Gustavo Sáenz y Juan Carlos Romero, de origen justicialista pero con una historia sinuosa en su representación.
La formación de estos agrupamientos no es por sí una acción cuestionable; por el contrario, se les reconoce un rol altamente significativo en la política democrática. Es un esfuerzo que hacen los partidos para sostener una agenda gubernamental conjunta, aunque cada uno tenga incentivos distintos para mantenerse juntos.
Los especialistas reconocen que las coaliciones se conforman en el afán de aumentar la competitividad electoral individual de cada partido pero también cuando las circunstancias políticas demandan acuerdos para enfrentarlas. Una de las coaliciones más reconocidas en la región es la que se integró en 1988 en Chile, cuando más de una docena de partidos políticos –incluso rivales acérrimos- frustraron la intención del dictador Augusto Pinochet de prorrogar su mandato, imponiendo su oposición en un referéndum convocado al efecto. Hasta estos tiempos siguen ganando elecciones multipartidistas.
En la Argentina, los frentes no son ajenos en materia electoral. El justicialismo es un gran promotor de estas uniones y, a veces, provocan que sus oponentes también se alíen para recortar sus avances en los comicios, especialmente en los distritos donde son gobierno.
Lo que no se ha logrado en este país son gobiernos de unidad nacional para sobrellevar y salir de crisis políticas y evitar la conflictividad social. Hay sociedades que han recuperado e impuesto la gobernabilidad a través de estos acuerdos pero no es el caso de la Argentina, donde no se desconoce la necesidad de armar consensos a partir de pactos interpartidarios. El ejemplo de la Mancloa recurrentemente emerge pero nunca se consolida en una iniciativa seria.
Las próximas 72 horas mantendrán ocupados a todos los sectores en el armado de las próximas propuestas electorales. Esto incluye a aquellos que tienen la responsabilidad de gobierno y que por estas horas han abandonado las exigencias de la gestión.
Son momentos trascendentes para la democracia.
Salta, 10 de junio de 2019
Tal como venimos insistiendo desde hace tiempo en estas columnas, en momentos de crisis la centralidad de la política pasa por el Congreso de la Nación. Allí se debate el presente y el futuro de la Argentina.
Sin antecedentes cercanos de una decisión similar, el Concejo Deliberante rechazó la Cuenta General del Ejercicio 2023, correspondiente al último año de gestión de Bettina Romero. Asimismo, aprobó por mayoría la del año 2024.
El Presidente muestra torpezas políticas y económicas que lo dejan cada vez más aislado. Gobernadores, aliados y votantes se alejan, mientras él insiste en culpar a los demás.
Las marchas en todo el país y el rechazo del Congreso a los vetos presidenciales expresan lo más elemental de la democracia: el pueblo y sus representantes le marcan límites al poder. No es un golpe, es participación ciudadana.
Congreso y gobernadores son dos partes del poder político que desvelan al Ejecutivo Nacional. Tras dos años con presupuesto prorrogado la administración libertaria ha entendido que puede ser un elemento ordenador de vínculos inconducentes, como los que ha venido manteniendo hasta ahora.
Se corrió el velo sobre el manejo de los recursos públicos durante 2026. Fueron expuestas las grandes líneas de lo que podría ser el primer presupuesto de un gobierno que va a ingresar en su tercer año de gestión.
El entrenador de la Selección Argentina habló tras la caída en Guayaquil. Analizó la última fecha de las Eliminatorias y destacó el trabajo del rival. También se refirió a la ausencia de Messi.
El candidato a senador acusó a la gestión Milei de priorizar la confrontación antes que resolver las necesidades de universidades, jubilados y provincias.
La Cámara Federal de Apelaciones de Salta rechazó una nueva impugnación de la defensa y dejó firme la solicitud de desafuero del legislador, investigado por peculado de servicio y abuso de autoridad.
Los ediles aprobaron la Cuenta e informaron que la Municipalidad capitalina utilizó fondos propios para su funcionamiento y que generó un superávit por 16.534 millones de pesos. Críticas a la gestión Romero.
Los ediles señalaron la cantidad de obras “abandonadas” de la gestión Romero a partir de su derrota electoral en mayo de 2023. Sumaron los sobreprecios en las obras de Plaza 9 Julio y canal de Yrigoyen.