Padre Mamaní: “La devoción a la Virgen de Urkupiña debe ensanchar el corazón y abrazar al prójimo”

La comunidad católica se congregó este jueves en la Iglesia Nuestra Señora del Pilar para celebrar la fiesta de la Virgen de Urkupiña, una devoción que enriquece la fe de miles de personas. Desde temprano, las calles se llenaron de fieles que, con paciencia y serenidad, esperaron la bendición de sus autos y ofrendas.

"Pedimos paciencia, estar tranquilos y serenos", expresó por Aries, el párroco Javier Mamaní señalando la importancia de mantener el orden y la devoción.

A las 4 de la tarde, la imagen de la Virgen partirá en procesión hacia el Campo Histórico de la Cruz, donde se espera que una multitud aguarde con fervor.

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En el marco de la festividad religiosa, el Padre Mamaní hizo un llamado especial a los fieles: "No solo pidamos lo que necesitamos, sino que ensanchemos nuestro corazón en fraternidad y solidaridad". Este mensaje resonó profundamente entre los devotos, recordándoles que la verdadera devoción va más allá de las peticiones personales, y se expresa en el amor y la ayuda mutua.

En la previa a la celebración a la misa de las 9 de la mañana, el párroco destacó que la devoción auténtica se vive con gestos más que con palabras. "Traemos nuestras cargas y sufrimientos, pero es fundamental abrir el corazón y abrazar al prójimo", afirmó el Padre Mamaní, subrayando que el materialismo no debe ocupar el primer lugar en nuestras vidas. "Lo material tiene su lugar, pero no pongamos el corazón en esas cosas, porque la vida es breve y debemos darle importancia a lo que verdaderamente perdura", añadió.

La jornada concluirá con una última misa a las 20:30, marcando el final de un día lleno de fe y comunión.