Miles de personas acudieron al Templete en busca de bendiciones y asistencia espiritual en medio de la crisis económica que, entre otras cosas, ha llevado al cierre de comedores comunitarios.
La comunidad religiosa enfrenta desafíos económicos debido al aumento de las tarifas de servicios y busca apoyo para cubrir gastos de electricidad, plomería y pintura.
El gobernador Gustavo Sáenz renovó el pacto de fidelidad al Señor y la Virgen del Milagro, pidiendo esperanza y unidad para todo el pueblo de Salta.
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Las principales partidas de gasto tendrán techos determinados. El Ejecutivo aseguró que avanzará en privatizaciones y espera un superávit comercial menor al de este año.
La Municipalidad y Agrotécnica Fueguina llevaron a cabo tareas de higiene urbana en distintos puntos de la ciudad tras las festividades religiosas.
Luego que el presidente exigiera a las provincias un ajuste de 60 mil millones USD, el Ministro aseguró que “el anuncio no sorprende, pero desestabiliza la actividad económica”.