Esa posición tiene al menos dos puntos de vista. Uno de ellos, cuando la idea del cambio o reemplazo generacional es una demanda que parece le hicieran a los mayores para que se retiren de la política lo que implica entender que se debiera cancelar de la política a las personas por no ser ya jóvenes. El otro punto de vista es quizás un llamado a los jóvenes a reemplazar a las que ya no son jóvenes, una suerte de escalafón etario que debiera cumplirse, vaya  a saberse como, para que estén por esa sola razón en la actividad política.

Creo por convicción que la política es el compromiso necesario e ineludible para que los países se gobiernen y en tal sentido todos sin excepción, estamos convocados a dicha actividad.

No creo en el reemplazo por la edad sino en la vigencia predominante de las ideas que sostienen los ciudadanos. Esas ideas son las que pueden ser apoyadas por jóvenes y no jóvenes. Hay momentos históricos en los que la política puede hacer un giro ya sea revolucionario o evolucionista en reemplazo de lo que estaba vigente hasta ese momento. Ese Cambio lo protagonizan ciudadanos de distintas edades. En algún momento se comprometieron, siendo jóvenes, personajes como Fidel Castro, John Fitzgerald Kennedy, Mahatma Gandhi para señalar solo algunos de los más conocidos. Algunos murieron jóvenes como Kennedy y otros mayores como Castro y Gandhi ejerciendo hasta su muerte una actividad política permanente.

Hay jóvenes que en la actualidad les disputaron a mayores, como el actual presidente de Chile Gabriel Boric quien le ganó las elecciones a un veterano de la política como fue el ex presidente Sebastián Piñera. A Boric el pueblo lo consagró en tal lugar por sus ideas y compromiso con esas ideas frente a la postura conservadora de Piñera. Es un cambio de paradigma que el pueblo quiso. A Donald Trump de 76 años le sucedió en la presidencia de los EEUU Joe Biden, un hombre que en la actualidad tiene 80 años, triunfó en la disputa contra el conservadurismo. Xi Jinping fue consagrado presidente de la República Popular China siendo un hombre mayor y continuó la senda de Mao Tse Tung quien falleció en la presidencia a los 83 años.

La actividad política es o debiera ser la actividad inherente al ser humano, pues con ella marca su presente y futuro y el fruto de tal servicio es el que podrá ser valorado para los cargos gubernativos.

La premisa del recambio generacional no se trata de una cuestión etaria sino que va ligada directamente a quienes se involucran en la política y tienen algo para decir y ofrecer a la ciudadanía y para ello no hay edad que valga. El general Perón, quien estimulaba el recambio generacional por las ideas que suponía debían impregnar a los jóvenes, murió siendo presidente a los 79 años.

Ojalá los jóvenes rechacen el prejuicio que la política es mala y sólo para unos pocos y asuman con conciencia clara que esa actividad debe ser la comunión diaria y no una quimera.