Reclamos
Los hechos se van acelerando y las postales de la inquietud social en tiempos de crisis, ya se están mostrando. Sin dudas que 2020 será un año que varias generaciones no olvidarán pero la tolerancia social frente a una pandemia inédita, no alcanzará para contener las protestas.
Hay una línea de insatisfacción que fue usufructuada por el sector político desplazado del gobierno nacional pero que está alcanzando formas de organización que le dan autonomía a la hora de reclamar lo propio. De allí que los llamados “banderazos” muestran una amplia variedad de consignas que impiden asociarlos a una oposición partidaria. En Salta, ese grupo viene creciendo a través de las redes sociales, desde donde se arman actos que repiten manifestaciones que simultáneamente se realizan en distintas partes del país. Se trata de Ciudadanos Autoconvocados de Salta. Según su página de Facebook son 180 personas y van en crecimiento. Ayer se movilizaron en demanda de un trato digno para los jubilados y el sábado pedirán por las “dos vidas”, como se expresa la oposición a la legalización del aborto.
Las distintas líneas de la izquierda suelen ocupar las calles frente a las propuestas que se tratan en el Congreso, donde su participación no es significativa. Es tradicional que la presencia del Fondo Monetario Internacional les dé razones para la protesta.
Otro tanto hacen sectores que por su informalidad afrontan problemas permanentes. Es el caso de los taxistas y remiseros que en estos días deben afrontar un competidor que impone la economía digital. La llegada de una aplicación que se ha extendido en el mundo, a pesar de los esfuerzos de estructuras tradicionales de servicios para frenar su avance, los inquieta y saben que no se han encontrado aún los modos para evitar que Úber les quite mercado.
Vecinos de distintos puntos de la ciudad no temen salir a la calle para llamar la atención por los problemas irresueltos de la vida cotidiana de la ciudad. La deficiente gestión de la Intendencia capitalina es razón para una movilización ciudadana que demanda soluciones y en algunos casos toma la iniciativa de hacer lo que la burocracia comunal no encara porque no sabe, no quiere o no puede. Cabe cualquiera de esas opciones.
Hay otras cuestiones que también han sacado a los ciudadanos de sus casas para mostrar en la calle lo que los gobiernos no han realizado en el ámbito de su competencia, en razón de una emergencia sanitaria que desde marzo alteró todos los planes y programas, para el caso que hubiesen estado definidos habida cuenta que se trata de gestiones que van camino a cumplir su primer año de un nuevo mandato. La prestación de servicios esenciales son causas que motivan la manifestación pública de amplias franjas poblacionales.
El último caso es la protesta sostenida en el norte de la Provincia por la falta de energía eléctrica y la mala calidad del servicio de agua y saneamiento. Si bien no demandan por la facturación, en el fondo de la cuestión inciden las tarifas.
Puntualmente en Morillo y tras varias jornadas de manifestaciones callejeras, los usuarios tomaron las oficinas de EDESA. El conflicto comenzó con la llegada de las altas temperaturas que impactan en una prestación que se caracteriza por su inestabilidad, la que se profundiza por la suba del consumo. No es un problema nuevo pero la solución que se había dado genera mayores costos que se volcaban en la tarifa. Las restricciones impuestas por la pandemia del coronavirus muestras estas aristas que está rasgando la sostenibilidad de empresas que son de envergadura. No se habla con precisión de levantar el congelamiento.
Diciembre seguramente vendrá con reclamos por salarios, contra la inflación, la desocupación y la pobreza. Son dramas sociales que duelen más cuando cierra un año complicado.
Salta. 24 de noviembre de 2020
Te puede interesar
La actitud ciudadana encontró la responsabilidad institucional
Tal como venimos insistiendo desde hace tiempo en estas columnas, en momentos de crisis la centralidad de la política pasa por el Congreso de la Nación. Allí se debate el presente y el futuro de la Argentina.
Cuentas
Sin antecedentes cercanos de una decisión similar, el Concejo Deliberante rechazó la Cuenta General del Ejercicio 2023, correspondiente al último año de gestión de Bettina Romero. Asimismo, aprobó por mayoría la del año 2024.
El error de Milei: cuando el problema es él mismo
El Presidente muestra torpezas políticas y económicas que lo dejan cada vez más aislado. Gobernadores, aliados y votantes se alejan, mientras él insiste en culpar a los demás.
La voz de la calle y del Congreso no es un golpe, es democracia
Las marchas en todo el país y el rechazo del Congreso a los vetos presidenciales expresan lo más elemental de la democracia: el pueblo y sus representantes le marcan límites al poder. No es un golpe, es participación ciudadana.
Incapacidad
Congreso y gobernadores son dos partes del poder político que desvelan al Ejecutivo Nacional. Tras dos años con presupuesto prorrogado la administración libertaria ha entendido que puede ser un elemento ordenador de vínculos inconducentes, como los que ha venido manteniendo hasta ahora.
Guía
Se corrió el velo sobre el manejo de los recursos públicos durante 2026. Fueron expuestas las grandes líneas de lo que podría ser el primer presupuesto de un gobierno que va a ingresar en su tercer año de gestión.