Desmemoria e ingratitud IV
Leandro Nicéforo Alem e Hipólito Yrigoyen que fueron columnas vertebrales del radicalismo, iniciaron su militancia estigmatizados por la trayectoria rosista de sus padres. Leandro, hijo del fusilado y colgado en la Plaza de La Victoria, hoy Plaza de Mayo, se vio obligado a alterar su apellido cambiando la “n” por una “m”. Hipólito, nacido en una modesta vivienda de Balvanera, fue dos veces diputado, profesor de filosofía. Historia Argentina e Instrucción Cívica en la Escuela Normal de Maestras, con el tiempo logró obtener una sólida posición económica que le permitió contactar con la gente de campo, criollos o gringos, y conocerlos y aceptar su sensibilidad.
Opinión18/07/2022 Miguel A. Cáseres