Los Infernales dieron batalla hasta el final pero no les alcanzó frente a San Martín

Con 15 puntos producto de 4 de 7 en tiros de campo (3/5 en triples y 2/2 en simples) el artillero infernal Federico De Miguel comenzó con la mano caliente. Por el lado de los dirigidos por Castro, el goleo fue más repartido y el crédito mayor quedo para el extranjero Michael Henry con 9 unidades.

Entretenido primer cuarto en La Linda donde la visita reaccionó frente a una ventaja adversa de 7 puntos (19-12) y terminó con una bomba sobre la chicharra de más de siete metros en manos de Juan Pablo Pedemonte para dejar a la Villa arriba por dos (26-28).

En los segundos diez minutos los chaqueños ampliaron a tres puntos la distancia en el marcador porque de menor a mayor fueron encontrando el juego asociado pero sobre todo mantuvieron buena efectividad en tiros de campo (fundamentalmente en lanzamientos de dos donde terminó el PT con 12/20 60 %).

Los Infernales, comandados por José Luis Pisani desde lo táctico, siguieron batallando a pesar de contar con un cortísimo recambio (con solo tres jugadores en el banco de suplentes) y de alguna manera tener la necesidad de volver al triunfo ante su gente. A pesar de seguir anotando, la producción goleadora en ese lapso de De Miguel se tranquilizó (5 ptos) indefectiblemente surgiendo en ese plano la humanidad del cubano Fundora (6 ptos), un triple del capitán salteño Arias Binda y un doble del base tucumano Alonso.

Entretenido primer tiempo entre salteños y chaqueños, como suelen ser los cruces entre estos dos grandes equipos en la segunda división del básquet argentino. Salta optó una vez más por una defensa en bloque fusionando lo zonal con lo individual, mientras que la Villa metió marca individual.

En el penúltimo chico la visita arrancó mejor ensanchando circunstancialmente la diferencia, sin embargo la garra y el corazón de Los Infernales volvió a emerger en el caliente polideportivo norteño. Tres y hasta más posesiones recuperadas lo que permitió correr el rectángulo con cierta holgura, además de buenas decisiones ofensivas al momento de tener que rotar la anaranjada, hicieron que los de Pisani arrancaran el último parcial abajo por la mínima: 69-70. Partidazo, una vez más, en el Delmi.

Batalló hasta el final. A pesar de las ausencias nada menos que del capitán, Nicol Zurschmitten, y Gonzalo Guevara, Salta Basket dio pelea hasta lo último como siempre. “Así vayamos perdiendo por 30 o de igual forma ganando por 30 siempre vamos a dar batalla y pelearla hasta el final”, sostuvo tras la derrota el goleador infernal Federico De Miguel (31 ptos).

En el último cuarto los de Chaco mantuvieron la tranquilidad necesaria para en pasajes adversos seguir por el camino que los condujo a la victoria: rotar el balón buscando al compañero mejor ubicado, cercar la zona pintada para interceptar cuanto esférico anduviera dando vueltas por los aires y defender a los hombres con gol en Salta.

Los Infernales volvieron a caer y ahora deberán afrontar un nuevo p0aprtido como local, este viernes también desde las 21.30 frente a otro duro rival: Echagüe de Paraná, Entre Ríos.