Pese a la nueva gestión, Argentina sigue estancada en el ranking global de corrupción

Obtuvo 37 puntos sobre 100 asignados al país más transparente, según la edición 2024 del Índice de Percepción de la Corrupción, que mide anualmente la ONG Transparencia Internacional.

Política11/02/2025

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En el primer año de gestión del presidente Javier Milei, Argentina se mantuvo con el mismo puntaje del último año de Alberto Fernández en el ranking que mide Transparencia Internacional (TI), a través de Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) en 180 países. En 2024 Argentina obtuvo apenas 37 puntos, bastante alejado de los 100, que es el puntaje al que se acercan los más transparentes. La medición a nivel nacional refleja que no se percibieron mejoras en materia de transparencia durante el último año.

A escala mundial Argentina se ubica en el puesto 99 entre los 180 países medidos, junto a países como Etiopía, Indonesia, Lesoto y Marruecos, a sólo una posición del año anterior.

“La corrupción es una amenaza mundial en progreso que no solo socava el desarrollo, sino también es un factor decisivo en el declive de la democracia, la inestabilidad y las violaciones a los derechos humanos. Combatirla debe ser una prioridad absoluta y constante de la comunidad internacional y de todos los países. Esto es fundamental para hacer retroceder el autoritarismo y asegurar un mundo pacífico, libre y sostenible”, dijo François Valérian, presidente de Transparencia Internacional.

WhatsApp-Image-2025-02-03-at-5.25.05-PMCortes de luz y ola de calor: el Norte es el más afectado

El mejor número de nuestro país se observó en 2019, cuando obtuvo un desempeño de 45 puntos, durante la presidencia de Mauricio Macri. No era un número alto, pero se acercaba a la media mundial. Tras la finalización de ese mandato y el cambio de gobierno, el país evidenció un marcado retroceso y el IPC registró una caída de 8 puntos, pasando de 45 a 37. Dichos resultados, contrastan significativamente con los esfuerzos graduales logrados durante la gestión previa, que habían permitido avances ligeros pero sostenidos en este mismo ámbito.

En efecto, la administración de Alberto Fernández no logró mantener las mejoras heredadas, diluyendo las iniciativas implementadas anteriormente y revirtiendo parte del progreso alcanzado. La baja de ocho puntos en cuatro años representa uno de los retrocesos más notorios en la evaluación de este indicador.

La peor performance había sido en 2015, cuando obtuvo solo 32 puntos sobre el máximo de 100, y quedó en el puesto 107 sobre los 168 países relevados en el Índice de ese año.

Martín D’Alessandro, presidente de Poder Ciudadano (el capítulo argentino de TI) , dijo que la corrupción es un problema endémico para muchos países, y también para la Argentina.

“Este índice evidencia que se trata de un fenómeno que se extiende a toda la política, no a un partido en particular. De la misma manera, se expande en múltiples espacios de la vida empresarial y económica. También puede inferirse una relación entre corrupción y abuso de los puestos de poder. Es vital que la ciudadanía deje de tolerar comportamientos ilícitos o autoritarios por parte de la política. Solo exigiendo decencia podremos construir un país estable y confiable”, sostuvo.

Con información de Infobae

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