Durante la madrugada un grupo de personas ingresó al domicilio del intendente de Rivadavia Banda Norte-Morillo, Atta Gerala, en el que lo maniataron a él, a su esposa y el sereno de su casa.
Una vez reducidos, los atacantes comenzaron a golpear a Gerala con puños y patadas para que les dijera “dónde estaba la caja”.
Los golpes se incrementaron a medida que Gerala respondía que lo que buscaban los delincuentes estaba en la Municipalidad.
Esto hizo que uno de ellos dijera “No quiere hablar, matalo”, frase generó el grito de la esposa del Intendente, y terminó llamando la atención de los vecinos.
A partir de allí los atacantes habrían agilizado el golpe para retirarse llevándose dinero y un vehículo propiedad del jefe comunal.
Por el momento se conoce que están peritando los celulares de los empleados de la Municipalidad de Morillo, ya que sospechan que hubo un “entregador”.
Mientras tanto, se evalúa si Gerala será trasladado a Jujuy o Salta, por sus familiares para que reciba atención compleja, ya que aseguran quedó desfigurado por los golpes recibidos.