Opinión 20/10/2020

Diálogo

Empujado por la profundización de la crisis, el Gobierno Nacional puso en marcha formalmente el Acuerdo Económico y Social, que apura el trámite de creación de un Consejo, prometido por Alberto Fernández en su campaña electoral, oficializado en su discurso a la Asamblea Nacional de marzo y anticipado como proyecto de ley en mayo, con la pandemia devorándose buena parte de las empresas y los correspondientes empleos.

Con la participación de un centenar de representantes del trabajo y la producción, se definieron diez puntos de consenso que estarán en el cimiento del proyecto de desarrollo que deberá diseñarse a través de mesas de trabajo.

La hoja de ruta confeccionada es de una simplicidad que no explica la demora en su definición y aplicación. Desde el encuentro de este lunes de trabajará por más exportaciones, en la inclusión de todos los sectores productivos, el abandono de la falsa antinomia entre mercado interno y externo, la relevancia de las políticas productivas, la incorporación de la dimensión ambiental, la necesidad de una macroeconomía estable para el desarrollo productivo y el imperativo de mejorar la productividad para reducir la pobreza y la desigualdad. Se deberán reducir las brechas de género, manejar inteligentemente la apertura comercial y asumir que toda política de desarrollo productivo debe tener carácter regional. Se trata de un manual básico de buenas prácticas para una salida conjunta de la crisis.

Luego de proponer en campaña un Consejo Económico Social como herramienta de gestión, el presidente Fernández hizo referencia al mismo el 1 de marzo, en la apertura de sesiones ordinarias del Congreso Nacional. Pretendía poner en su mesa la resolución de planteos que iban de la promoción de decisiones estratégicas para el desarrollo a la generación de mejores instituciones. Apenas días después vino el aislamiento y al Consejo le asignó la tarea de sentar las bases de un nuevo acuerdo social, para reconstruir la economía nacional después del durísimo impacto por el parate de la cuarentena.

Más de 20 proyectos se han acumulado en el Congreso de la Nación desde 1984 a la fecha buscando crear este espacio de debate y propuestas. Este afán incluye al diputado salteño mandato cumplido Normando Arciénaga, que en 1987 presentó su iniciativa y también al ex presidente Raúl Ricardo Alfonsín, cuando en 2002 ocupaba una banca en el Senado. En 2019 fue el turno de otro ex presidente y actual senador Carlos Saúl Menem quien propuso la creación del Consejo Económico, Social y Ambiental de la República Argentina. 

Enjundiosos fundamentos no lograron que el Parlamento trate seriamente algunas de estos proyectos. Los socialistas insistieron en cuatro oportunidades desde 1988, seguros que era el camino para posibilitar el diálogo y la participación de los diversos sectores de la sociedad argentina, condición indispensable para emprender el camino a una necesaria concertación nacional. Y no convencieron. 

Este lunes, se empezó con un acuerdo. El Gobierno lo presentó como la única salida de la crisis porque ya se probaron muchas recetas en la Argentina que no dieron resultados. 

Por encima de las diferencias sectoriales se ha colocado el diálogo social. Debiera funcionar.

Salta, 20 de octubre de 2020

Te puede interesar

Conflicto

La semana hábil corta que se inicia mañana, cerrará con un hecho muy importante en la Provincia.

Palabra

La salida de la crisis es a través de un pacto de gobernabilidad. Debe contener las aspiraciones y los límites de las partes que actualmente son protagonistas de una riesgosa confrontación.

Estar a tiempo entre la historia y el futuro

Feliz comienzo del otoño. Hoy tocó un día gris, fresco y con lluvia. Creo que lo estábamos esperando todos.

Ajuste

El ajuste emerge como el tema más preocupante para los gobiernos provinciales, especialmente a partir de la insistencia de la gestión nacional de alcanzar el déficit cero como prioridad excluyente.

Una Ley para los Argentinos

Ya se está discutiendo en el Congreso de la Nación la llamada Ley Bases, enviada por el Poder Ejecutivo Nacional.

Dengue y Estado

Con dengue pero sin prevención, sin repelente, sin políticas proactivas ni comunicación preventiva.