Por Aries, la docente Marina Laguna explicó que este planteó surgió cuando empezaron a sospechar del manejo irregular de fondos y hasta el día de hoy no han tenido una respuesta clara por parte de la rectora de la entidad, Silvina Añez.

Laguna explicó que Añez reconoció que al no tener ayuda de un profesional para llevar el control de recibos y libro contables, había recurrido a un contado pero hasta el día de hoy no pueden conocer fehacientemente información certera sobre los gastos que cuestionan.

La preocupación de los profesionales se incrementa porque se trata de datos que deben ser de acceso fácil.

Detalló que entre la documentación que presentaron a los diputados, se encuentra boletas a las que tuvieron acceso se habrían encontrado en la oficina de la rectora correspondientes a todo tipo de compras que “no tienen anda que ver con la vida institucional”.

En este sentido, enumeró que observaron tickets de un celular por 15 mil pesos, una gran compra de ravioles, y consumiciones de Mac Donalds.

“No se aclara en qué se invierte la plata de la escuela ni vemos que las cuentas estén claras”, aseguró Laguna.

Por último, afirmó el malestar de parte de los integrantes de la entidad al descubrir que el edificio que los obligaron a dejar de utilizar, en Zuviría 180, por supuestamente estar en peligro de derrumbe, está siendo utilizado por la organización  JCI, que preside la hija de la rectora de la Escuela de Música.