El ex presidente de Boca Mauricio Macri, quien estuvo al frente de la entidad en el exitoso ciclo entre 1995 y 2007, confirmó que va a participar en las próximas elecciones de diciembre acompañando al candidato Andrés Ibarra y apuntó contra la actual dirigencia asegurando que de continuar por este camino el club va "rumbo a ser más chico".

En la presentación del proyecto de la nueva Bombonera que propone Ibarra, el exmandatario expresó: "Estamos tristes con lo que vemos de Boca hoy y por qué no volver a soñar. En el lugar que me necesiten yo voy a estar siempre".

Macri aprovechó la ocasión para comparar el presente xeneize con lo que fue su etapa en la que el equipo llegó a ser campeón del mundo al mando de Carlos Bianchi. "El respeto interno, la armonía, el apoyarse unos a otros es lo que sentimos que se ha perdido. Más allá de los títulos, Boca construyó una institución sólida y reconocida en el mundo", afirmó en TyC Sports.

Macri también apuntó contra el vicepresidente Juan Román Riquelme y, sobre su decisión de volver a involucrarse en la política xeneize, esgrimió: "Lo voy a hacer desde la convicción que lo que se hizo estos años ha sido muy dañino y continuar en esta línea va a hacer a Boca más chico y sin confundir que lo que Riquelme ha hecho en la cancha ha sido increíble".

“La Argentina sufre un caudillismo agravado, y eso es lo que le pasa a Boca también”, sostuvo Macri en una entrevista con LN+ y detalló: “El pecado es el personalismo, el autoritarismo, la falta de trabajo en armonía entre el cuerpo técnico y los jugadores, la directiva y los empleados de club. Eso se ve domingo a domingo”.

La Capital