En el día de ayer recibieron una orden de desalojo con un plazo de cinco días, que se cumplen el próximo martes, para abandonar el predio que ocupan hace más de un año. 

"Estos terrenos están abandonados por el gobierno, como resultado de la mala planificación del barrio, somos 8 familias que nos vinimos acá hace más de un año”, explicó María una de la vecinas asentadas. 

María contó que en múltiples oportunidades se reunieron con Gustavo Carrizo, titular del IPV para llegar a una solución sin embargo solo recibieron “promesas falsas”. 

“Hace una semana se comprometió a darnos una audiencia junto con el intendente Manuel Saravia, pero nuevamente nos mintió y esta vez fuimos notificados del pedido de desalojo para dentro de cinco días", indicó María.

Los vecinos se manifestarán este viernes por la mañana en las puertas del IPV.