La primera se llamaba Abigail Riquel y encontraron su cuerpo semienterrado en la zona de avenidas Francisco de Aguirre y América. A simple vista, había sido golpeada en la cabeza con un objeto contundente, presentaba indicios de asfixia y abuso sexual.

La segunda víctima, Abigail Luna, tenía dos años y murió ayer en la Policlínica de San Cayetano. Su mamá denunció que su pareja la había golpeado hasta matarla y el hombre, de 33 años, quedó detenido.

Abigail Luna tenía solo 2 años y llegó muerta a la guardia del hospital San Cayetano en brazos de su madre. La nena tenía golpes en todo el cuerpo y al ser interrogada por los médicos su mamá culpó a su pareja por la paliza que provocó la muerte de su hija. Se trata de Gerardo Paz, de 33 años, quien se encuentra desde entonces demorado en la comisaría y, de confirmarse el testimonio de su mujer, quedará detenido oficialmente.

Un hombre con antecedentes por abuso sexual apodado “Culón” se convirtió en el principal sospechoso del crimen de Abigail Riquel después de que un testigo asegurara haberlo visto llevarse a la menor al interior del descampado donde más tarde encontraron su cuerpo. Ese dato fue suficiente para que anoche un grupo de personas rodeara la casa del presunto asesino y la prendieran fuego en venganza por el homicidio de Abigail.

El sospechoso había salido días atrás de la cárcel tras cumplir condena por una causa por robo agravado y se encuentra prófugo. “Desapareció la chiquita y desapareció él. Y cuando todos los vecinos empezaron a buscar la encontraron tirada y tapada con tierra”, explicó ayer otro vecino a los medios locales. De él, no se sabe nada desde entonces. Sin embargo, para el fiscal a cargo del caso, Ignacio López Bustos, no existen aún pruebas suficientes que vinculen al sujeto con el asesinato de la nena de 9 años.

En tanto, los familiares de la menor denunciaron que en la Seccional 12 de Villa Muñecas no quisieron tomarles la denuncia por la desaparición y que demoraron el inicio del operativo de búsqueda.

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