Por Aries, Raúl Cabral detalló que se trata de una sequía muy fuerte y por la desesperación en la que se encuentran quieren que los funcionarios los escuche porque están perdiendo animales y en bastante cantidad.

“No estamos siendo asistidos por nadie”, detalló y agregó que solicitan que les puedan colaborar con agua y forraje.

Explicó que no pueden ni vender los animales por la flacura que tienen y no cuentan con nada para solventar los gastos.

Por su parte, Mónica Burgos aseguró que son varias las familias campesinas que vienen padeciendo esta situación hace varios meses por la caída de muy poca lluvia este año.

“Ya no queda monte verde, no queda pasto, no hay qué coman los animales. Se están muriendo de hambre y sed. Ahora ni siquiera tenemos agua para las familias”, afirmó la mujer.

Por esta razón, consideró que se encuentran en un estado de abandono porque ninguna autoridad de la zona, en este caso puntual del departamento San Martín, se acercó a manifestar su preocupación o intención de ayudarlos a solucionar el problema.

Burgos dijo que los animales son el medio de subsistencia de la los pequeños productores, actividad de que la vive la mayoría de los campesinos de la zona.

Además advirtió el deterioro que están sufriendo en su salud los vecinos de la zona por la falta de agua potable, lo que los lleva a consumir agua salada y se refleja en que la mayoría son operados de vesícula o tienen cálculos en los riñones.