De principio a fin, así fue el triunfo que consiguió Salta Basket ante su gente en el Polideportivo Delmi, el segundo como local y el tercero en general en la competencia de ascenso. En los primeros 10 puntos el artillero infernal, Mateo Bolívar, ingresó con la mano caliente y quemó las redes. Luego, con el transcurso de los minutos, el resto de Los Infernales mantuvo la hegemonía sobre los cordobeses.

Cuando las aguas parecían mansas, apareció el fantasma de Morteros y los dirigidos por Gustavo Lucato se quedaron con el segundo parcial. Bonja y Tabbia irrumpían en escena para mantener las ilusiones de su escuadra intactas, pese a la diferencia de 11 puntos con la que Salta se fue al descanso largo.

El penúltimo capítulo fue demoledor. El plantel dirigido tácticamente por Esteban Gatti pasó por arriba a los oriundos de Morteros con un parcial de 20-7 a favor. La alegría en el rostro del público salteño que volvió a acompañar al equipo de la provincia empezó a diseminarse en las tribunas del Estadio. El local ponía las cosas en su lugar y se perfilaba hacia un nuevo triunfo.

En los últimos 10 minutos Gatti siguió con el habitual recambio mandando al tabloncillo salteño a la mayoría de sus dirigidos. Gran triunfo infernal con buenas actuaciones en el local como las de Bolívar, González y Cardo, sumado al importante aporte del resto del plantel. El rival además del bajón del tercer cuarto tuvo demasiadas pérdidas durante el juego (18 contra las 12 de Salta). Al margen de las estadísticas y a diferencia del choque en Córdoba, esta vez el “tiro” ganador fue de Los Infernales.

Los próximos encuentros para Salta Basket serán el jueves y el sábado que viene en Mendoza, frente a Rivadavia, y en Córdoba ante Barrio Parque. Luego, habrá que poner el foco en las semifinales de la Liga Sudamericana, el histórico certamen internacional que mantiene en vilo a los salteños y el básquet nacional en general.