Obligaciones

El creciente agravamiento de la situación sanitaria quedó en un segundo plano al promediar esta semana, luego de la embestida de referentes de distintos bloques legislativos provinciales que cuestionaron la gestión del gobernador Gustavo Sáenz, especialmente por el manejo de ingentes recursos girados por el gobierno nacional para enfrentar el Covid 19. El pronunciamiento tuvo su propia versión en el cuerpo legislativo capitalino, donde se reordenaron las adhesiones sin que emergiera la principal figura del gobierno municipal. Bettina Romero fue apenas una referencia tapada por la exigencia de tomar partido en una puja que la supera, al igual que a los 59 intendentes restantes.

De todas maneras, la línea discursiva desnudó la posibilidad que se esté preservando el acuerdo que llevó a ambos dirigentes a sus respectivas magistraturas. Es así que la defensa de la figura del Gobernador de la Provincia marcó la diferencia con el kirchnerismo y no con el romerismo que suele poner incómodos a quienes vienen acompañando a Sáenz desde su gestión municipal en el Concejo Deliberante, en tiempos de la intendencia de Miguel Isa.

Dos piezas se movieron insinuando lo que se jugará en las elecciones de medio tiempo de 2021. La única referente de Pares, el residuo del otrora prometedor Partido Renovador de Salta, hizo suyo el documento de diputados que cuestionaron la determinación de prioridades en tiempos de restricciones financieras y gastos consecuentes, parapetada en un monobloque que no le genera dependencia alguna de los líderes de la política local.  En tanto, el representante del macrismo anunció su separación del saencismo dando por sentado que el acercamiento de ese sector al PJ es algo más que la tradicional jugada picaresca del peronismo, de apropiarse de los gobiernos que no obtiene en las urnas.

En vísperas de decisiones trascendentes de carácter netamente comunal, como es la resolución de la licitación del servicio de higiene urbana, la voz cantante de la mayoría en el Concejo Deliberante guardó las armas con las que venía vinculándose al Ejecutivo capitalino. Romina Arroyo, titular del bloque que representa en el Municipio a la alianza que lidera el gobernador,  planteó que el desafío actual de la dirigencia es salir de la grieta abandonando la disputa política en torno del gobierno provincial o municipal. Cerró el debate convocando a pensar en quien cerró su negocio o no tiene para comer, dejando de lado la discusión que genera discordia y odio.

Es que a los gobiernos les espera la obligación de dar respuestas a urgencias cada vez más exigentes como las que pretende sin demoras el sector de la pequeña y mediana empresa. Tanto el Ejecutivo Provincial como el de la ciudad van a recibir un pliego de demandas para evitar que siga derrumbándose la estructura de las pymes que producen y son la fuente de trabajo genuino.

Esa es la tarea que conecta a dos figuras políticas que no pueden enfrascarse en la disputa de espacios de poder. Las victorias pírricas son, en realidad, derrotas que condenan a la sociedad.

Salta, 24 de setiembre de 2020